viernes, 13 de noviembre de 2015

Reflexión sobre la soberanía catalana

Catalanes, Mas ha atentado contra España y su unidad. Ha intentado romper su legítima integridad. Quizás haya sido para demostrar su desesperación, ante los acontecimientos que han sucedido en Cataluña. Aunque no lo creais, sois españoles. Es posible que haya una minoría que piense como Mas, pero creo que su forma de pensar y actuar es muy similar a la del País Vasco. Una comunidad autónoma debe estar para lo bueno y para lo malo con su país. No se puede actuar bien cuando el resto del país va bien, y cuando el país pasa por un tiempo menos favorable, querer separarse de España. No os debéis aprovechar ni mucho menos tratar de chantajear al país con vuestros pensamientos separatistas. Cataluña tiene algunas cosas buenas, como por ejemplo, la unión entre sus provincias, y su forma coordinada de actuar entre estas, pero debe mostrar una actitud responsable, y apoyar a su país para que, al ayudar a recuperar al resto de comunidades autónomas, también mejore la economía catalana, en lugar de entorpecer esta recuperación, con unas acciones infantiles, y totalmente indignas de una comunidad autónoma que piense y actúe con cuatro dedos de frente. Si observamos países tales como Alemania o Inglaterra, vemos que hay un apoyo mutuo entre todas sus ciudades. Es muy positivo para el buen progreso de un país el hecho de que todas sus ciudades y comunidades autónomas estén unidas. Esto ayuda la economía y bienestar global de un país, y como consecuencia, de todas y cada una de las ciudades y provincias. Así que catalanes, no os perjudiquéis, ni con vuestras acciones, entorpezcáis al pueblo español

lunes, 26 de octubre de 2015

Palabras de buena Fe

La vida nos ofrece oportunidades, para poder intentar mejorar en todos los aspectos de nuestra vida, siempre y cuando olvidemos nuestros malos recuerdos o rencores

Actuar benévolamente

En esta vida, todo llega, todo se disfruta o se sufre, y al final, todo pasa.
Por mucho que nos esforcemos, no siempre obtendremos el resultado que buscamos; aunque con perseverancia, creo que casi todo se puede lograr.
Hay cosas que uno ve y admira, pero que no podemos alcanzar.
Estas cosas están tratadas con cariño, y por ello, cambian para mejor.
Cualquier cosa puede ser tratada bien durante mucho tiempo, y poco a poco, va mejorando.

Qué decir de las personas.
Si a alguien que queremos lo tratamos bien, poco a poco irá mejorando.
Esta mejoría se reflejará en uno mismo, lo cual, nos debería animar a seguir tratándola bien.
Si uno admira a alguien, será porque ha pasado por este proceso, y por ello, debemos respetar a esa persona, pues alguien habrá invertido tiempo y cariño en ella, y es por esto, que si interrumpimos ese proceso, esta persona se verá gravemente perjudicada, ya que estará confusa y no sabrá a quién hacer caso, si a un conocido o a algún espontáneo desconocido.

Así que, si queremos que un objeto se convierta en una joya o una persona se convierta en una persona admirable, hemos de buscar algo o alguien que nadie quiera, e ir puliendo poco a poco con cariño, para que mientras dure nuestro esfuerzo, vayamos viendo como cambia a mejor

El lujo de pensar

Pensar
Bonito lujo, aunque parezca algo insignificante.
Parece que está prohibida esta acción.
Nos impiden hacerlo con excesivas distracciones.
Si varias personas se juntan para hacerlo, puede ser sospechoso.
Qué malo puede tener hacerlo, siempre que sea para un bien común.
Deberían haber más debates, y menos concursos.
Debates en los que cada cual pudiese dar su opinión, o al menos, participar de algún modo.
Creo que estamos ciegos por algo que no vemos.
Queremos ser aquello que nunca alcanzaremos.
El juego siempre nos lleva a la avaricia (mala consejera), mientras que el diálogo, siempre ayuda a limar las diferencias y ayudarnos a mirar al futuro, de una forma mejor.
Apostar nuestro futuro es mala opción.
Podríamos pensar en el diálogo por el bien común, y en lugar de criticar, buscar soluciones entre todos

jueves, 23 de julio de 2015

Reflexiones

En esta vida, no hay pan ni muerte.
Sólo hay ojos, que quieren verte.

Perdona a tu enemigo, y ayuda a tu amigo,
ya que, sólo así, tu corazón y tu alma,
serán dignos de tí.

Ayuda al pobre, pues éste,
te ayudará a verte mejor.

Si quieres verte como eres,
no te mires al espejo, pues éste,
mostrará tu cara,
que es el espejo del alma.

En esta vida, hay momentos malos,
mas ninguno, como perder un ser amado.

Uno puede ser torpe y cobarde,
pero, aun así, Dios te apoyará.

Hay días malos, y momentos buenos.
Por qué no aprender de unos, y recordar los otros.

No critiques a tu amigo,
por fallos, que tú cometiste,
ya que siempre,
el más perjudicado serás,
al no querer, ver la realidad

lunes, 20 de abril de 2015

Para aquellos catalanes aférrimos


Es bueno recordar a veces, que todos estamos bajo la bandera española, aunque haya gente por el norte de nuestro país que, a veces, piensen cosas distintas a la mayoría, que crea que son mejores que el resto de los demás ciudadanos, o que busquen independencia o cosas que vayan en contra de la opinión general.
Quizás nos tomen algunos por inferiores, pero, está científicamente demostrado que, todos somos iguales cuando nacemos, y que, criticar muchas veces denota envidia.
La envidia, según la Iglesia, es uno de los siete pecados capitales.
Otro pecado capital es la ira.
Estos dos, muchas veces, nos traicionan de forma que no nos damos cuenta.
Pero el pecado que abunda en estos españoles no practicantes, no es otro que la soberbia, ya que, catalanes y vascos, creo que se os olvidan grandes monumentos de vuestras respectivas comunidades autónomas españolas, como por ejemplo la Sagrada Familia, pertenecen al ámbito religioso.
Es por estos motivos por lo que pienso que, en lugar de generar discordia entre comunidades autónomas, es mejor perdonarnos, ya que, no es más valiente el soberbio, ni el que tiene ira o envidia, sino, aquel que sabe perdonar a los demás, y vivir, de esta forma, en paz con su prójimo

sábado, 4 de abril de 2015

Te amo, Señor

Aquella noche vi una luz.
Era tu Amor que se acercaba.
Vi en tu sonrisa un amigo.
Siempre has sido mi salvador.

Hay días y hay noches.
Hay luces y hay sombras.
Mas no hay verdad más grande.
Que tú eres quien me guía.

No hay Pan sin trabajo.
Ni Fe sin Amor.
Es por eso Señor, que a tí te
entrego, mi triste corazón.

No hay noche más larga Señor,
que la que no quiero verte.
Pues humillo tu Corazón,
al no quererte.