lunes, 26 de octubre de 2015

Palabras de buena Fe

La vida nos ofrece oportunidades, para poder intentar mejorar en todos los aspectos de nuestra vida, siempre y cuando olvidemos nuestros malos recuerdos o rencores

Actuar benévolamente

En esta vida, todo llega, todo se disfruta o se sufre, y al final, todo pasa.
Por mucho que nos esforcemos, no siempre obtendremos el resultado que buscamos; aunque con perseverancia, creo que casi todo se puede lograr.
Hay cosas que uno ve y admira, pero que no podemos alcanzar.
Estas cosas están tratadas con cariño, y por ello, cambian para mejor.
Cualquier cosa puede ser tratada bien durante mucho tiempo, y poco a poco, va mejorando.

Qué decir de las personas.
Si a alguien que queremos lo tratamos bien, poco a poco irá mejorando.
Esta mejoría se reflejará en uno mismo, lo cual, nos debería animar a seguir tratándola bien.
Si uno admira a alguien, será porque ha pasado por este proceso, y por ello, debemos respetar a esa persona, pues alguien habrá invertido tiempo y cariño en ella, y es por esto, que si interrumpimos ese proceso, esta persona se verá gravemente perjudicada, ya que estará confusa y no sabrá a quién hacer caso, si a un conocido o a algún espontáneo desconocido.

Así que, si queremos que un objeto se convierta en una joya o una persona se convierta en una persona admirable, hemos de buscar algo o alguien que nadie quiera, e ir puliendo poco a poco con cariño, para que mientras dure nuestro esfuerzo, vayamos viendo como cambia a mejor

El lujo de pensar

Pensar
Bonito lujo, aunque parezca algo insignificante.
Parece que está prohibida esta acción.
Nos impiden hacerlo con excesivas distracciones.
Si varias personas se juntan para hacerlo, puede ser sospechoso.
Qué malo puede tener hacerlo, siempre que sea para un bien común.
Deberían haber más debates, y menos concursos.
Debates en los que cada cual pudiese dar su opinión, o al menos, participar de algún modo.
Creo que estamos ciegos por algo que no vemos.
Queremos ser aquello que nunca alcanzaremos.
El juego siempre nos lleva a la avaricia (mala consejera), mientras que el diálogo, siempre ayuda a limar las diferencias y ayudarnos a mirar al futuro, de una forma mejor.
Apostar nuestro futuro es mala opción.
Podríamos pensar en el diálogo por el bien común, y en lugar de criticar, buscar soluciones entre todos